¿Dónde comer en la capital colombiana? He aquí ocho deliciosos restaurantes en Bogotá para todos los gustos y bolsillos
Bogotá es multicultural, cosmopolita, bulliciosa y caótica. La metrópoli más poblada de Colombia ha adoptado costumbres de casi todos los rincones del país y de diversos destinos del globo. Su creativa y cosmopolita escena gastronómica es prueba de ello y los restaurantes en Bogotá saben cómo lucirse.
En su pantone de sabores conviven la empanada, el ajiaco, la paella, la parrilla argentina, el sushi, las almojábanas, el falafel, la pasta y hasta el pato laqueado… Estos son mis ocho restaurantes favoritos para probar esa amalgama de tradiciones culinarias que es Bogotá. (El orden es aleatorio).
La Puerta Falsa
No hay que dejarse engañar por el aspecto austero del restaurante más antiguo de la ciudad, fundado en 1816. Tampoco hay que huir ante las largas colas que se forman en la entrada. La espera vale la pena y llega en forma de comida de la abuela, de sabores de toda la vida; tradición gastronómica con creces.
Situado a tiro de piedra de la Plaza Bolívar, en el barrio La Candelaria, La Puerta Falsa es perfecto para degustar la cocina santafereña. Ajiaco –sopa de patatas, pollo y alcaparras–, chocolate o agua de panela con pan y queso o tamal, son algunas de sus exquisiteces.
Prudencia
Ingredientes locales, mínimo desperdicio en la cocina, conexión y respeto con el entorno natural y técnicas como el ahumado, es lo que se encuentra en Prudencia. Situado en el barrio de La Candelaria, se nutre del espíritu creativo, intelectual y cosmopolita de la zona.

El menú es itinerante y nunca será el mismo; cada dos semanas lo anuncian en sus redes sociales. Además, a partir de este mes, ha inaugurado las “tardes de gastronomía”, de viernes a domingo y para un máximo de 20 personas. Donde los comensales disfrutarán de ocho platos servidos progresivamente en una experiencia que puede durar entre tres y cinco horas.
Local by Rausch
Exaltar los sabores tradicionales de Colombia, usando productos autóctonos, es el objetivo de Local by Rausch. En él los célebres hermanos Rausch rinden homenaje a la cocina del país. Sabores locales cocinados y presentados con mimo.
Hay que probar las empanadas de ajiaco, el encocado de camarones o los buñuelos rellenos de chicharrón acevichado. Tampoco hay que perderse sus cócteles protagonizados por frutas tropicales y postres como el créme brulée de tres leches o la oblea de achiras.
Wok
Con varias sucursales alrededor de Bogotá y más de 20 años de experiencia, Wok ha reinterpretado la cocina asiática usando ingredientes provenientes de comunidades locales y con una filosofía que se basa en el consumo sostenible.

Entre sus platos podemos encontrar los famosos ramen japoneses, sushi, arroces fritos, pad thai u otros platos de noodles, entre otros. Siempre a precios asequibles y preparados con productos asiáticos cultivados en Colombia.
Masa
El olor del croissant de almendras recién horneado se mezcla con la dulce melodía del jazz que sale por los altavoces de esta panadería artesanal. Regentada por dos hermanas apasionadas por la cocina, Masa es un espacio rústico y acogedor, con toques modernos y una terraza para disfrutar de las tardes capitalinas.
En sus cuatro locales reinan las canastas de pan rústico, las mermeladas caseras y, por supuesto, la bollería artesanal. A la hora del desayuno, además, hay que optar por las tostadas francesas o el muffin relleno de huevo revuelto. En la tarde, desde sándwiches hasta pan au chocolat engordan la lista de opciones para chuparse los dedos.
Andrés Carne de Res
Este es ya todo un emblema, sin duda, uno de los restaurantes en Bogotá que no hay que perderse en ninguna visita a la capital. Andrés Carne de Res ofrece una de las experiencias más extraordinarias de la ciudad, en sus diversos locales; tanto a nivel gastronómico como de espectáculo.
Desde su magnífico menú –de 70 páginas– en el que predomina la cocina autóctona nacional, hasta su extenso calendario de eventos en el que caben el desenfreno, todos los géneros musicales y espectáculos sin parangón. No hay que perderse su arepa de chócolo con queso, un icono de la casa, o cualquiera de sus frituras.
Leo
Regentado por la chef Leonor Espinosa, Leo –uno de los mejores del mundo en 2019–, es un baile gastronómico alrededor de los ecosistemas de Colombia. Aquí, la cocina es “una manifestación de la vida de montaña, bosque, páramo, valle, mar, isla, manglar, selva tropical y río”.

Sus platos surgen de las vivencias en los territorios biodiversos de Colombia. Son un homenaje a los ingredientes y bebidas más ancestrales del país. Moluscos, algas, frutas tropicales, hierbas y tubérculos… hacen parte de un menú que se disfruta con los cinco sentidos.
Al Agua Patos
Ya existen las arepas rellenas o con cosas por encima, los crepes o los sándwiches; ahora llega el turno de los ‘patos’. Se trata de una tostada cuadrada de pan, puede ser de banano, maíz, tocineta o integral, al que se le añaden ingredientes salados o dulces por encima. En Al agua Patos sacaron a relucir su lado más original.

Tan simples –aunque deliciosos– como un pato con chocolate y fresas hasta uno tan complejo como el Carbonara. Pollo en hilo con salsa carbonara, tocineta crocante, champiñones y lajas de queso parmesano. Además, en su amplia carta también encontramos ensaladas, bowls, sopas y desayunos con granolas caseras.
La lista de restaurantes en Bogotá es infinita, hay para todos los gustos, bolsillos y de toda clase. Esta es mi lista personal, los que creo que deberías probar en cualquier viaje a la capital colombiana. ¡Espero que te sirva!
Es una muestra muy variada y para todos los gustos de la extensa y variada de gastronomía de la Capital.
Gracias!! Espero que te sirva. 😉
Me sirve! Gracias!